Pacific Storm (PC)

Pacific Storm, Definitivamente Lesta Studio Ha Hecho una Muy Buena Jugada al Introducir en el Mercado un Excelente Híbrido que se Centra Especialmente en Todo lo Relacionado con el Teatro del Pacífico Dentro del Marco de la Segunda Guerra Mundial

Tormenta del Pacífico

En este nuevo comienzo de semana, volvemos ante todos ustedes para traerles uno conjunto de nuevas revisiones siempre respetando el orden establecido por nuestra programación, la cual por cierto ha sido especialmente elaborada en esta oportunidad para poder abordar un par de propuestas muy interesantes y que toman como fuente de inspiración el conflicto bélico que conocemos en la actualidad bajo el nombre de la Segunda Guerra Mundial, aunque en ambos títulos se tiende a abordar dicho conflicto de una perspectiva muy distinta a otros juegos que ya hemos probado anteriormente y tratado en algunos de nuestro artículos, mientras que las otras propuestas que revisaremos más adelante consisten en juegos que fueron lanzados al mercado muy recientemente, siendo uno de ellos la sexta expansión correspondiente al extraordinario World of Warcraft, sin duda una de las mejores creaciones de la Blizzard Entertainment, mientras que el otro consiste en un título muy interesante que fue denominado Shadow Tactics: Blades of the Shogun, aparte de que estos juegos que constituyen lanzamientos relativamente recientes se centran en una perspectiva mucho más épica de la guerra, una característica que se notará mucho sobre todo en la sexta entrega del gran World of Warcraft. En este mismo sentido, hemos decidido empezar primero con las propuestas que se enfocan en la recreación de diversos aspectos específicos en relación a la Segunda Guerra Mundial, razón por la cual en el presente artículo revisaremos un excelente videojuego de combates navales que ha estado en nuestro poder desde ya algo de tiempo, por lo que podemos decir con propiedad que el mismo ha sido uno de los mejores juegos de este tipo que hemos podido jugar, esto muy a pesar de todos los problemas y fallos importantes que podemos encontrar en su interior, pero antes de entrar en materia vamos a recordar un poco nuestra experiencia con propuesta muy similar a esta que logramos revisar hace un par de semanas atrás y que constituye uno de esos juegos liberados con un carácter totalmente exclusivo para la potente consola casera Xbox 360 de la Microsoft, el cual por cierto llegó a esta parte del mundo con el nombre de Naval Assault: The Killing Tide, aunque llegados a este punto es importante comentar que con la llegada de la última generación de consolas era evidente un mayor esfuerzo por parte de las compañías desarrolladoras para poner en marcha los géneros que se desarrollaron por primera vez casi exclusivamente para su implementación en las computadoras personales, siendo los videojuegos resultantes simulaciones de diversos tipos con una mayor profundidad, títulos especialmente enfocados en la gestión y algunos RPG de buena calidad cuyas únicas deficiencias en comparación con sus contrapartes originales consisten generalmente en algunos problemas específicos con el sistema de control.

En relación a este último punto, Naval Assault: The Killing Tide, un título que fue publicado en su momento por la gente de Artech Estudios y desarrollado por el gran equipo de 505 Games, a pesar de ser un lanzamiento de «presupuesto» y con carácter de exclusividad para la Xbox 360, sin duda cae en ese grupo de juegos que antes sólo habrían atraído a una audiencia de jugadores más acostumbrados al uso de los ordenadores caseros, ya que este último esfuerzo por parte de la desarrolladora 505 Games nos permitía asumir el rol de un valiente capitán de los poderosos comandos submarinos de la marina durante el pleno auge de la Segunda Guerra Mundial, teniendo como principal objetivo el sembrar la muerte y la destrucción en todo lo largo y ancho del Océano Atlántico, haciendo todo lo posible por detener el avance de la flota controlada por los nazis, quienes por cierto también contaban con el famoso submarino, el terror de cualquier barco aliado durante los años oscuros de la guerra, aunque si hemos aprendido una cosa de Naval Assault: The Killing Tide, es que ser el capitán de un submarino puede pasar rápidamente de ser algo muy emocionante a ser algo francamente aburrido, pues aparentemente, los submarinos que se incluyeron dentro de este juego solamente poseían solamente tres ajustes de profundidad, a la vez que el combate se reducía a la utilización de un torpedo ocasional, seguido por varios momentos de evadir y/o sentarnos con los motores apagados justo cuando las cargas de profundidad comenzaban a explotar alrededor nuestro. Lo anterior, podíamos llegar a hacerlo casi siempre en este juego, a menos que nuestro enemigo finalmente reaccionara y decidiera llevar las cosas hasta un nuevo nivel, pero por desgracia, el sistema de inteligencia artificial solía ser demasiado estúpido la mayor parte del tiempo, siendo este solo uno de los muchos problemas que podían encontrarse presentes dentro de Naval Assault: The Killing Tide, además de que sus controles eran demasiado simplistas, lo que a final de cuentas contribuía en hacer que las misiones sin inspiración se sintieran como especialmente valiosas, al tiempo que los niveles resultaban ser bastante difíciles, aunque si bien es cierto que contábamos con la posibilidad de cambiar entre siete velocidades diferentes y elegir entre un total de tres ajustes de profundidad para nuestro submarino, pero más allá de de todo eso, la única otra acción consecuente que se podía llevar a cabo consistía en apagar el motor completamente para de esta forma ir de un lugar a otro en silencio y así evitar una posible detección por parte del enemigo, o bien, disparar a los barcos controlados por la facción contraria con nuestros torpedos disponibles y con las armas instaladas en la cubierta, lo que difícilmente a menudo se derivaba de situaciones realmente abrumadoras, en las cuales debíamos disparar bien y evitar en todo momento ser destruidos por hordas de barcos que aparecían de repente a nuestro alrededor, o en lugar de ello proceder a hundir la mayor cantidad de embarcaciones enemigas en un corto período de tiempo.

Asimismo, la campaña especialmente diseñada para un solo jugador constaba de tan solo cinco capítulos, incluyendo un capítulo con carácter de prólogo que a su vez contenía una misión con carácter de tutorial, por lo que este último estaba igualmente integrado por un total de cinco misiones (excluyendo el capítulo del prólogo), lo que nos daba un total de 27 misiones que debían ser superadas en el Modo Principal, además de cada una de las misiones incluidas, a excepción de la que cuenta con un carácter de tutorial , tiene cinco estrellas al lado, de manera que las estrellas eran de un color gris justo al principio, pero se iban tornando de color dorado y comenzarían a mostrar su respectiva calificación más adelante, aunque cuando una misión era seleccionada por primera vez, se nos presentaban la opciones que nos permitían elegir entre un total de tres niveles de dificultad muy diferentes entre sí y que eran: fácil, normal o difícil, así que cuanto más complicada era la dificultad, más daño recibía nuestro submarino cuando era impactado por los disparos de un barco o avión enemigo, aparte de que desgraciadamente no había ningún tipo de recompensa tras jugar en los niveles de dificultad más difíciles. Por otro lado, los propios objetivos de cada misión eran típicamente simples, ya que la gran mayoría de ellos consistían más que todo en llevar a cabo la destrucción de una embarcación específica, pero de vez en cuando estos variaban un poco ofreciéndonos algunas situaciones muy interesantes tales como persecuciones, las cuales por cierto debíamos realizar mientras evitábamos acercarnos a las minas o en base a otro tipo de condiciones similares, aunque muy a pesar de ello el objetivo general siempre continuaba siendo el mismo, de modo que también habían otros objetivos tales como la interceptación de transmisiones enemigas, aparte de que en ciertas ocasiones nos podíamos encontrar con una gran cantidad de minas a nuestro alrededor mientras intentábamos llevar a cabo el cumplimiento de una misión, las cuales por cierto eran capaces de ocasionar un cierto nivel de daño sobre nuestro submarino, por esta razón debíamos hacer todo lo posible por destruirlas o evitarlas.

En este mismo orden de ideas, a partir de ahora en adelante vamos a enfocarnos en la revisión del título que mencionábamos justo al principio del presente texto y que también forma parte de nuestra extensa lista de juegos que consideramos imprescindibles para cualquier jugador interesado en los juegos de guerra lanzados para los diferentes sistemas y plataformas, el cual por cierto se relaciona con la propuesta descrita en párrafos anteriores por el simple hecho de tomar como inspiración la Guerra del Pacífico que tuviera lugar dentro del marco de la infame Segunda Guerra Mundial, considerada por muchos historiadores como el conflicto bélico más sangriento de toda nuestra historia, además de que también nos permite la utilización de inmensas embarcaciones militares, dándonos la posibilidad de asumir el rol de un comandante supremo, el cual estará encargado en todo momento de diversos aspectos relacionados con la investigación, el diseño de unidades navales y aviones de combate, así como también de la eventual producción y despliegue de tropas en el campo de batalla, al tiempo que nos permitirá vivir la guerra de una manera más directa de lo que habitualmente estamos acostumbrados, ya que es posible actuar en cualquier momento como un marinero común y corriente, lo que quiere decir que vamos a poder controlar varias posiciones de armas ubicadas en la cubierta de un barco o en el interior de un avión de combate, de modo que el título al cual estamos haciendo referencia llegó a occidente bajo el nombre de Pacific Storm, consistiendo en un videojuego de estrategia y tácticas que presenta muchos elementos que podemos encontrar en otros géneros, tales como los shooters con perspectiva en primera persona, siendo desarrollado en su totalidad por una compañía llamada Lesta Estudio, mientras que la gente de Buka Entertainment y los veteranos de CDV Software Entertainment fueron los encargados de todos los detalles en relación a su posterior publicación a nivel mundial. De esta forma, el lanzamiento al mercado de este particular híbrido especialmente enfocado en los combates navales comenzaría a tener lugar a partir del 28 de septiembre del año 2006, momento en el cual era posible encontrarlo en las estanterías de buena parte de las tiendas especializadas dentro del territorio estadounidense, aunque ya desde el 4 de febrero del año 2014 ha sido posible conseguirlo a través de la famosa plataforma Steam, estando disponible en un primer momento en formato físico y con un carácter completamente exclusivo para los usuarios de ordenadores caseros que cuentan con la plataforma Windows de Microsoft como sistema operativo, contando con un Modo especialmente diseñado para brindar una experiencia de juego para un solo usuario, además de otro que se centra en las partidas entre varios jugadores, siendo a su vez uno de los juegos creados por medio de la utilización del potente motor gráfico conocido como OGRE Engine.

Características Principales

En vista de ello, y refiriéndonos al trasfondo histórico del juego tenemos que la Segunda Guerra Mundial ha estallado, por lo que nosotros estaremos a cargo de todo y sin estar sometidos aparentemente a ningún tipo de presión, ya que uno de los muchos aspectos atractivos de los juegos de computadora consiste en la capacidad de estos para ponernos mágicamente en los zapatos de otra persona, de modo que los videojuegos pueden convertirnos en generales, guerreros, pilotos, médicos, patinadores e inclusive alcaldes u otro tipo de mandatarios, pero en realidad es muy raro ver un juego que se atreva a simular más de un solo papel al mismo tiempo, trasplantando nuestro agudo intelecto en más de una cabeza virtual, por lo que este título denominado Pacific Storm y que ha sido traído a nosotros gracias al excelente trabajo realizado por los veteranos de CDV es una de esas propuestas fuera de lo común, aunque si bien es cierto que no es más que una simulación en todo el sentido de la palabra totalmente centrada en el Teatro del Pacífico durante el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial, razón por la cual nos invita siempre a involucrarnos en todo, desde la estrategia táctica de alto nivel hasta el pilotaje en tiempo real de aviones de combate específicos, así que en Pacific Storm ningún trabajo es demasiado para los entusiastas de los juegos de guerra basados en la Segunda Guerra Mundial. En este mismo sentido, tal y como sugiere el nombre de título, el mismo se centra de forma exclusiva en el conflicto librado en el área del Pacífico entre las fuerzas al servicio de los Estados Unidos de América y Japón, por lo que contaremos con la posibilidad de elegir jugar como una de estas poderosas naciones, a la vez que se nos permitirá reescribir algunos aspectos de carácter histórico en el proceso, además de que la campaña para un solo jugador se nos presenta en dos variedades diferentes que son: «Campaña Libre» y «Campaña Histórica«, de modo que el escenario histórico trata de recrear en la medida de los posible la realidad de la guerra del Pacífico, algo que se hará por medio de despliegues unitarios históricamente precisos, reservas y fuerzas relativas a cada una de las facciones involucradas en el conflicto, así que mejor pensemos en él como el «modo fácil» para los Estados Unidos, y el «modo complicado» para los japoneses, mientras que el modo libre tiende a ser un poco más equilibrado que el anterior, dando al Japón más ventajas de las que podría haber tenido en la vida real.

Partiendo de lo anterior, después de haber jugado este título durante buena parte de la semana pasada, nos hemos quedado muy impresionados con la escala general presentada aquí, ya que la guerra naval librada entre el Japón Imperial y los Estados Unidos de América es sin duda alguna una de las más grandes y, en nuestra humilde opinión, es quizás uno de los enfrentamientos más dramáticos de toda la historia, por lo que no es una tarea pequeña el recrear el conjunto con todos los detalles que vamos a poder encontrar presentes en este juego, de modo que aquí nos toparemos con un total de dos campañas muy diferentes, tal y como mencionábamos de manera previa, en donde una de las configuraciones se basa en la historia y en la otra las fuerzas involucradas son relativamente iguales al principio, al tiempo que una serie de batallas tácticas de carácter independiente y la inclusión de un generador de batalla ofrecen una oportunidad para que los jugadores prueben el llevar a cabo diversas acciones de carácter individual, además de que uno de los aspectos más llamativos del juego consiste en su capacidad de recrear el ritmo y el sabor generales de la guerra sin necesariamente mantenerse fiel a los acontecimientos históricos, pues aquí los japoneses no siempre atacan en Pearl Harbor, por dar un ejemplo, y no siempre habrá un enfrentamiento en Midway, por lo que algunas partidas pueden llegar a incluir una masiva batalla total en las aguas alrededor de Bouganville, o bien, pueden consistir en un intento por parte de los japoneses de cambiar el rumbo de la guerra desde el sur hacia el norte, de manera que cada nueva decisión dirigirá siempre la experiencia de juego en direcciones totalmente inesperadas e interesantes. Por otro lado, hay tres niveles de juego aquí, por lo que al encontrarnos en el nivel más alto vamos a poder estar a cargo de la creación y del eventual movimiento de las flotas, así como también de nuestros hombres y materiales disponibles, al tiempo que nos encargaremos de los objetivos más relacionados con la producción e investigación de los esfuerzos de guerra correspondientes al país que estaremos controlando, además de que igualmente será posible llevar a cabo la captura y la construcción de bases, mientras gestionamos una gran cantidad de recursos y materias primas, creando a su vez varias formaciones, aparte de que también podremos efectuar diversas actualizaciones sobre las unidades que se encuentren obsoletas y toda una serie de otras actividades de carácter esencial. Por otra parte, cuando nuestras fuerzas se topen con las que estarán siendo controladas por el enemigo, vamos a contar con la opción de tomar el control de la batalla en un formato tradicional basado en la estrategia en tiempo real, mientras todo el combate se lleva a cabo en un mapa que ha sido completamente diseñado en base a tres dimensiones, el cual representa la ubicación en la que estaremos luchando en un momento determinado y que puede ir desde el Canal de Panamá a Saigón, además de que una amplia variedad de pedidos nos permitirá establecer el tono general de la batalla sin tener que gestionar las acciones de cada una de las unidades que están bajo nuestro mando, aunque por último, descubriremos la existencia de un Modo de Acción que nos permite saltar y salir del control directo de cualquier avión aliado en las batallas tácticas, por lo que una vez nos encontremos en interior de su cabina, tendremos el control total de la nave en cuestión e inmediatamente vamos a poder combatir a las unidades que estén siendo controladas por la facción contraria, interceptar las bombas arrojadas por el enemigo o lanzar nuestras propias bombas y torpedos sobre las naves del adversario, aparte de que el Modo de Acción anteriormente descrito también nos permite manejar los cañones antiaéreos ubicados en cualquier barco de nuestra flota.

En concordancia, con tantas cosas en marcha, bien nos puede llevar algunas horas el acostumbrarnos a los conceptos más básicos de este particular juego especialmente enfocado en los combates navales durante la Segunda Guerra Mundial, aunque afortunadamente una serie de tutoriales nos explicarán con gran lujo y detalles los elementos más esenciales, dándonos de esta forma un poco de ventaja, pero aún así, con un juego tan denso como este, el tutorial deja muchos aspectos sin explicación, razón por la cual no tendremos más opción que descubrir los puntos más finos de este título jugándolo en profundidad y consultando de manera constante el manual que viene incluido en el paquete, además de que el nivel estratégico suele alternar entre el mover las flotas en un mapa similar al de un juego mesa y manejar las diversas preocupaciones logísticas en una serie de ventanas bastante suaves de color marrón, las cuales ciertamente no son más secas que las ventanas que podemos encontrar presentes en otros juegos de carácter logístico disponibles en el mercado, de modo que algunos jugadores bien pueden encontrarse bostezando al intentar descifrar las hojas de cálculo que se les irán mostrando en todos los niveles del juego estratégico, pero lo cierto es que por muy aburridos que estos puedan llegar a ser, son absolutamente esenciales para ganar la guerra, aparte de que todo nuestro esfuerzo es financiado en todo momento por medio de la acumulación de hierro, aluminio y petróleo proveniente de nuestras bases ubicadas en todo el Pacífico. En este mismo sentido, todos los recursos son devueltos a la «patria«, siendo este el lugar donde se investigará una amplia gama de nuevas tecnologías y donde se ordenará la producción de todo, desde acorazados hasta torpedos, por lo que a medida que se vayan construyendo nuevas unidades, estas serán entregadas en el puerto principal correspondiente a nuestra nación, donde serán atendidas, alimentadas y ubicadas en formaciones más grandes, esto debido a que un barco solitario no tiene lugar en esta guerra, razón por la cual vamos a querer llevar a cabo la creación de grandes flotas que puedan actuar de manera independientemente, de modo que este juego nos dará siempre una lista de varios tipos diferentes de agrupaciones y con un solo clic podremos incluso ordenar la construcción de todas las unidades necesarias para crear bien sea una flota de aviones rápidos o una división completa conformada por muchas unidades de transporte, al tiempo que necesitaremos tener una amplia gama de bases bajo nuestro control, no sólo para las mismas sean capaces de proporcionarnos una fuente de ingresos estable, sino también para que sirvan como reabastecimiento de combustible, así como también para reparar y rearmar puntos para las flotas y grupos aéreos, aparte de que cada una de las bases que estarán bajo nuestro control se van a poder actualizar por medio del levantamiento de una amplia gama de edificios, los cuales pueden ir desde iglesias que mejoran la moral hasta los campos de tiro que mejoran la efectividad de los puertos, así como también la capacidad carga y descarga de munición, almacenaje de combustible y otros suministros.

Apartado Gráfico y Sonoro

Ahora bien, en lo que respecta a las gráficas de este juego, bien podemos añadir que todo el conjunto de elementos visuales presentes en Pacific Storm parecen funcionar bastante mal a pesar de todo, incluso con las opciones fijadas en los ajustes más bajos, de modo que los problemas en relación a los gráficos serán realmente evidentes justo cuando tengamos a un montón de unidades involucradas en una sola batalla, pero incluso las acciones más pequeñas tenderán a ser demasiado agitadas debido a la calidad tan deficiente de los elementos gráficos, aunque llegados a este punto es importante señalar que lo anterior no quiere decir que los gráficos sean malos, pues por la escala del juego y por la gran cantidad de cosas que representa, los gráficos son bastante impresionantes, ya que las cargas de modelos individuales para los barcos y aviones de combate, así como también de un montón de edificios y un modelado tridimensional de todo el Pacífico, son más que suficiente trabajo para cualquier equipo decente de artistas gráficos, además de que el equipo encargado de la creación de Pacific Storm ha logrado agregar mucho carácter y sustancia a cada objeto que fue incluido dentro del juego, por lo que cada nave y avión viene con pequeñas animaciones que van desde torres giratorias y torres de control de fuego hasta la apertura de las bahías y de los timones de trabajo, aparte de que el simple hecho de ver que las partes de los barcos y aviones se mueven todo el tiempo añade una gran cantidad de vida a este título. Por otro lado, y en lo concerniente al apartado sonoro, podemos decir que el sonido en Pacific Storm tiende a ser bastante genérico, a pesar de que el sonido de la batalla consigue añadir un poco de emoción a toda la experiencia, pero aún así la gran mayoría de los elementos audibles son demasiado pobres como para ser totalmente convincentes, además de que el fuego proveniente de los cañones ubicados en la cubierta del USS Washington pueden seguramente sacudir la habitación de casi todos los usuarios de los usuarios debió a su potencia, aunque lo mismo bien podría decirse en relación a la música, pues mientras que la misma se compone de algunos temas militares muy agradables, la calidad de las mismas no tiende a ser muy buena, lo que en realidad es una verdadera lastima.