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Stringer, Un Simulador Creado para Salvar Vidas
Entrenando desde el Plano Virtual
Siempre ha existido el debate sobre si los videojuegos contribuyen a generar más violencia de la que ya estamos habituados a ver en los medios de comunicación, o si de verdad pueden representar un pasatiempo de provecho en muchos aspectos para los consumidores. Aunque, generalmente los detractores de la industria de los videojuegos siempre buscan justificar sus argumentos al centrarse siempre en los shooters en primera persona y otros géneros en los que el jugador debe causar la muerte de algunos personajes, sean estos humanos o no, exponiéndose además a situaciones a las que no están acostumbrados en la vida real y en las que predomina la violencia, de manera que debido a la exposición prolongada ante tales juegos, los usuarios terminarían desarrollando cierta insensibilidad por la vida de los demás y una posible alteración en su percepción de la realidad.
No obstante, y muy a pesar de estas argumentaciones en contra, cada vez son más las nuevas propuestas que surgen y contribuyen a demostrar que los videojuegos pueden ser una actividad muy productiva, al tiempo que ayudan a estimular la creatividad de los jugadores. Tal es el caso del genial Electroplankton que podemos encontrar disponible para el Nintendo DS, el cual es un juego que permite crear música original a partir de ciertos elementos, así como otros títulos que sirven para aprender inglés y otros idiomas, establecer rutinas de ejercicios para desarrollar la agilidad mental, entre otras posibilidades más. En este mismo sentido, hoy abordaremos un juego que también fue creado para instruir a los usuarios, aunque de una manera mucho más especializada y en un área bastante importante, la cual tiene que ver con el ámbito de los conflictos bélicos.
Características Principales
Tomando en cuenta lo anteriormente planteado, el título en cuestión se llama Stringer y consiste en un complejo simulador de realidad virtual enfocado al periodismo de inmersión con perspectiva en primera persona, el cual tiene como principal finalidad colocar al usuario en medio de un campo de batalla situado en Afganistán, utilizando tan solo una cámara de video y un kit de primeros auxilios como herramientas de aprendizaje. Asimismo, este asombroso simulador fue ideado por un visionario de nombre Ben Sainbury y desarrollado bajo el excelente motor gráfico Unity3D, el cual fue modificado para incluir algunas herramientas más avanzadas que permitieran la inclusión de cinemáticas en tres dimensiones, siendo estas creadas por la gente de Cine Suite.
Por otro lado, Stringer utiliza el famoso dispositivo de realidad virtual conocido como Oculus Rift VR el cual aún se encuentra en fase de desarrollo, además del controlador Razer Hydra cuya función consiste en dotar de una mayor profundidad al juego, al tiempo que permite lograr un nivel de inmersión mucho más alto durante la experiencia del jugador. En esta misma línea, Stringer es el fruto de una colaboración entre una compañía desarrolladora de aplicaciones en tres dimensiones conocida como Cine Suite y la afamada George Brown College’s School of Design, incluyendo además la contribución de seis destacados estudiantes en las áreas de programación, desarrollo y diseño de videojuegos. De igual manera, para el desarrollo de este interesante simulador de realidad virtual se contó con una subvención de $30.000, la cual fue otorgada en su totalidad por los Ontario Centres of Excellence.
En relación a ello, entre todos los miembros del equipo encargado del desarrollo de Stringer, destaca muy especialmente la figura de Ali Kokulu, un estudiante recién graduado tras culminar un post-grado en diseño de videojuegos, el cual además es de origen turco y que llegó a Canadá hace mucho tiempo atrás para poder asistir a George Brown. En este sentido, poco después de haberse integrado a este innovador proyecto, el joven Kokulu logró alcanzar el cargo de asistente de productor y diseñador, el cual le permitiría trabajar de una manera mucho más directa durante el desarrollo de esta poderosa herramienta de realidad virtual, enfocada a la formación en primeros auxilios para los periodistas, al tiempo que les permitiría a estos enfrentarse a situaciones de combate en zonas de guerra.
Por otra parte, la figura de Ben Sainsbury (quien es el jefe del proyecto), fue quien inicialmente presentó la idea a la George Brown College’s School of Design con miras a establecer una colaboración, la cual permitiera el desarrollo de esta importante y revolucionaria herramienta de realidad virtual. De este modo, todo comenzó cuando Ben Sainsbury se encontraba estudiando en la University of Southern California, pues en determinado momento logró enterarse de que en dicha universidad se estaban realizando varias pruebas con miras a desarrollar un tratamiento efectivo para el Trastorno por Estrés Postraumático, las cuales eran llevadas a cabo por el Instituto para Tecnologías Creativas.
De igual manera, Sainsbury descubrió que mientras se llevaban a cabo dichas pruebas, el equipo encargado de la investigación utilizaba en todo momento el dispositivo Oculus Rift y el poderoso motor gráfico Unity para revivir en la mente de las personas el mismo incidente que dio origen al estrés post-traumático, al tiempo que se intentaba desensibilizarlos ante el mismo y así ayudarlos a superar el trauma ocasionado por la experiencia, lo que a su vez constituye un paso muy importante para poder tratar dicho desorden.
De esta forma, Sainsbury quedó profundamente impactado ante tales investigaciones, razón por la cual decide llevar dicho concepto hasta Canadá e implementarlo en un área muy similar, aunque en primera instancia no logró obtener el apoyo necesario para su implementación. En este mismo sentido, decidió darle un nuevo enfoque a todo el concepto, de manera que este ahora se centraría más en la formación y ayuda a los periodistas independientes, los cuales no cuentan con los recursos necesarios para acceder a una formación profesional que les permitiera prepararse adecuadamente para enfrentar las situaciones de guerra y los conflictos armados.
Poco tiempo después, Sainsbury logró enterarse de que a través del financiamiento del Natural Sciences and Engineering Research Council of Canada (NSERC) la George Brown College’s School of Design tiene campo libre para llevar a cabo diversos proyectos enfocados a la salud y otras áreas de investigación, las cuales involucren el uso de las tecnologías y la asistencia sanitaria como tratamiento. De esta manera, y tras presentarles los pormenores de lo que sería el proyecto Stringer, logró obtener todo el apoyo necesario para su posterior desarrollo, al tiempo que se consultaría con varios expertos en el área, siendo la gran mayoría de ellos periodistas que ya habían estado en zonas de conflicto y Mike Webster, quien ayudaría al equipo desde el Wilderness Mediacal Associates International.
Partiendo de todo lo anterior, la idea central del simulador Stringer consiste en situar a los usuarios en las diversas situaciones de tensión que suelen presentarse en las zonas donde se libran conflictos bélicos, al tiempo que se les brinda todo el apoyo posible para que estos puedan comprender las técnicas más adecuadas para proceder de manera efectiva con su trabajo, además de permitirles aprender labores de salvamento y hasta conocimientos básicos de primeros auxilios.
En este mismo sentido, una de las principales razones por las que Ben Sainsbury decide crear este videojuego educativo se debe a su inspiración en la historia de un corresponsal de guerra, el cual falleció en una zona de combate debido a que no tenía los conocimientos necesarios en labores de primeros auxilios. Sin embargo, en la actualidad el proyecto Stringer se encuentra aún en desarrollo al igual que el dispositivo Oculus Rift, por lo que se espera salga al mercado en dentro de muy poco tiempo.
El Oculus Rift
En relación a lo anterior, cabe destacar que el Oculus Rift es un periférico de realidad virtual en forma de casco y que fue desarrollado por una compañía llamada Oculus VR, teniendo como principal finalidad el ofrecer un mayor nivel de inmersión a los usuarios durante la experiencia de juego. Asimismo, este innovador producto cuenta con dos versiones, las cuales están enfocadas a los desarrolladores de videojuegos y otros campos como la medicina, el diseño y hasta la educación.
Todo comenzó cuando Palmer Luckey contaba con apenas 18 años de edad, momento en el cual su afición hacia los videojuegos y la realidad virtual le llevaron a experimentar con diversos aparatos que fue acumulando con el pasar del tiempo, hasta que finalmente logró dar con el primer modelo del producto que conocemos hoy en día bajo el nombre de Oculu VR, el consiste en una gafas estereoscópicas que funcionan a través de una pantalla LCD de 7 pulgadas. En esta misma línea, dicha pantalla era conectada a una computadora desde donde se iniciaba un programa informático cuya finalidad consistía en alterar la salida de la tarjeta gráfica, lo que causaba que la pantalla se dividiera en dos partes, dando así la impresión al usuario de estar percibiendo dos imágenes diferentes en cada ojo.
Implementación en un Mod para Doom 3
Poco tiempo después, Luckey logró hacer contacto con John Carmack, mejor conocido como el responsable directo del videojuego Doom 2, tras lo cual este último logra adquirir unas de estas gafas de realidad virtual y decide utilizarlas para desarrollar una versión modificada de Doom 3, la cual fue mostrada en varias ferias y eventos relacionados con la industria de los videojuegos, logrando impactar a la comunidad mundial. Así que, de manera posterior a este hecho, Luckey toma la decisión de iniciar una campaña crowdfunding a través de Kickstarter para producir estas gafas, logrando así alcanzar la asombrosa cantidad de 2,5 millones de dólares en tan solo 4 horas.
Resumen
Stringer consiste en un complejo simulador de realidad virtual enfocado al periodismo de inmersión con perspectiva en primera persona, el cual tiene como principal finalidad colocar al usuario en medio de un campo de batalla situado en Afganistán, utilizando tan solo una cámara de video y un kit de primeros auxilios como herramientas de aprendizaje. Asimismo, este asombroso simulador fue ideado por un visionario de nombre Ben Sainbury y desarrollado bajo el excelente motor gráfico Unity3D, el cual fue modificado para incluir algunas herramientas más avanzadas que permitieran la inclusión de cinemáticas en tres dimensiones, siendo estas creadas por la gente de Cine Suite.