Worms World Party (PSX)

Worms World Party, La Popular Franquicia de Team 17 Regresa Nuevamente al PSX en su Séptima Versión Superando Todo lo Alcanzado Durante la Entrega Anterior

Regresa la Serie Worms en una Fiesta de Disparos y Explosiones

Seguimos abordando más y más videojuegos de guerra que consideramos realmente imprescindibles para todo jugador, por lo que durante esta semana decidimos arrancar con un par de propuestas muy interesantes y que fueron lanzadas en su momento para una de las mejores consolas caseras desarrolladas por la Sony Computer Entertainment, la cual no es otra más que una robusta máquina gris denominada PSX, o Playstation One por los fans, que era capaz de leer discos compactos y que necesitaba utilizar un par de memorias para guardar los avances que habíamos logrado en cada uno de sus juegos. En este mismo sentido, la mencionada consola casera de la Sony contaba con la particular característica de mostrarnos una cinemática de presentación bastante sencilla e impresionante, la cual hacía acto de presencia una vez encendíamos este curioso sistema, de modo que en un fondo blanco aparecía el logo la compañía encargada de su creación mientras escuchábamos una melodía bastante profunda, lo que servía de preludio a lo que próximamente estábamos por experimentar: una de las mejores experiencias de nuestras vidas, aunque a pesar de todas las fortalezas con las que contaba este poderoso sistema, sobre todo a nivel de gráficas y de sonido, adolecía de una mayor capacidad en lo que respecta a los controles, ya que solamente nos permitía conectar dos mandos, a diferencia de su competidor directo creado por la Nintendo que ofrecía la oportunidad de conectar hasta cuatro controles para una experiencia Multiplayer más intensa, divertida y menos restrictiva.

No obstante, otro de los problemas de este particular sistema casero consistía en el hecho de que sus mandos podían enredarse con mucha facilidad, al tiempo que estos mismos periféricos en realidad no eran tan cómodos como los que podíamos encontrar disponibles para el Nintendo 64, los cuales a pesar de ser aún más grandes y voluminosos, permitirán a los usuarios acostumbrarse aún más rápidamente a cualquiera de los juegos, además de que también permitían la integración de varios aditamentos especiales como el Rumble Pak, que consistía en un vibrador muy potente, el Conroller Pak, un especie de Memory Card aún más resistente que la del PSX y hasta el famoso Transfer Pak, que nos permitía conectar un cartucho de la consola Game Boy, o su variante conocida como el Game Boy Color, por lo que era posible jugar con este como si de un Super Game Boy se tratase, además de llevar a cabo otras funciones, aunque lamentablemente esta particular característica apenas fue aprovechada por algunos juegos, más que todo por las únicas versiones del genial Pokémon Stadium que llegaron a occidente. Por otro lado, era evidente que el PSX tenía poco que ofrecer en ese sentido, pero lo cierto es que contaba con una importante ventaja consistente en la posibilidad de incluir cinemáticas del tipo FMV dotadas con una resolución realmente elevada y un nivel de detalles evidentemente muy superior a las que podía soportar su competidor directo, además de tener la capacidad suficiente como para almacenar elementos sonoros de alta calidad, a diferencia de las bandas sonoras basadas en MIDI que tanto se utilizaron en el Nintendo 64, ni hablar del hecho de que el Playstation One poseía un catalogo de juegos mucho más amplio que el de esta gran consola de la Gran N, aunque si bien es cierto que muy pocas esas numerosas propuestas fueron capaces de sobresalir y mantenerse vigentes hasta nuestros días.

En vista de ello, es importante señalar que los aquellos que tuvimos la oportunidad de crecer con ambos sistemas recordamos los múltiples altibajos que estos sufrieron, sobre todo en lo que respecta a la cancelación de muchos juegos que esperábamos con muchas ansias, algo que era bastante común en el Nintendo 64, ya que lamentablemente perdimos la oportunidad de seguir conociendo más acerca de muchos títulos como el esperadísimo Mother 3, Eternal Darkness y Dinosaur Planet (conocido más tarde como Star Fox Adventures), aunque si bien es cierto que estos últimos fueron lanzados para la próxima consola de la Gran N, la cual fue presentada en un principio con el nombre de Dolphin y que posteriormente sería cambiado por el de Game Cube, convirtiéndose rápidamente en uno de los sistemas más poderosos de todos los tiempos. Sin embargo, la gente de la Sony Computer Entertainment no se quedaría con los brazos cruzados, ya que ellos también contaban con un nuevo sistema llamado Playstation 2, el cual era evidentemente más poderoso que el ya viejo PSX, brindando mayores posibilidades a la compañías desarrolladoras la momento de llevar a cabo sus proyectos, además de permitirnos jugar online, aunque si bien es cierto que esta característica también estuvo presente en su rival directo, de modo que la guerra entre estas consolas se mantuvo muy reñida a lo largo de varios años, dejando en el recuerdo todo lo que vimos durante las pasadas generaciones.

No obstante, a pesar del advenimiento de los sistemas más modernos, aún existen usuarios que conservan con especial cariño sus viejos sistemas y que hacen todo lo posible por conseguir algunos de los títulos que salieron para el mismo, desde los más populares hasta los más desconocidos y raros de encontrar, de modo que el PSX es una de las opciones más interesantes a elegir al momento de buscar juegos curiosos y que marcaron pauta dentro de la industria, así como también para darnos cuenta de cómo muchas empresas fueron capaces de liberar muchas propuestas realmente mediocres y que merecen ser olvidadas, o bien, servir como ejemplo de lo que no se debería hacer durante las nuevas generaciones. Por otro lado, es un hecho que el PSX cuenta con muchos títulos interesantes enfocados en diversos géneros, por lo que a lo largo de todo este tiempo nos hemos dado a la tarea de revisar algunas propuestas muy buenas para este sistema, siendo las más recientes un par de lanzamientos más orientados en el uso de la estrategia y las tácticas de combate, siendo uno de ellos el título conocido como Worms Armageddon, el cual fue desarrollado por la gente de Team 17 y que nos permitía vivir una experiencia mucho más intensa que la que tuvimos durante las anteriores entregas de la popular serie Worms, dándonos la oportunidad de personalizar diversos aspectos del juego y utilizar un amplio arsenal para deshacernos de los gusanos controlados por el adversario.

Por su parte, también nos referimos en otro artículo a una propuesta muy curiosa que llegó a estos lares con el nombre de Hog of Wars, una de las creaciones de la extinta Infogrames Studios para este mismo sistema casero de la Sony Computer Entertainment, el cual por cierto fue considerado por muchos como la versión tridimensional de Worms, ya que se jugaba de una manera muy parecida, aunque en lugar de gusanos podíamos controlar a un escuadrón de cerdos, algo que podíamos hacer siempre bajo un sistema de turnos. Sin embargo, y a pesar de las cosas en común entre dichas propuestas, la realidad es que Hog of Wars ofrecía más variedad que Worms en diversos aspectos, sobre todo por el hecho de brindarnos la posibilidad de promover a nuestras unidades de combate, además de contar con un Modo Principal para un solo jugador mucho más elaborado y todavía más complejo, aparte de que también contaba con una trama argumental propia que le servía de base y le otorgaba cierta profundidad a todo el conjunto, muy a pesar de que esta no era capaz de compararse con la que podíamos encontrar presente en otros juegos de estrategia como el fabuloso Tactics Ogre: Let Us Cling Together, Warcraft II o la mayoría de las entregas de la serie Romance of the Three Kingdoms desarrolladas por Koei.

Ante todo lo expuesto anteriormente, daremos inicio a una nueva revisión en base a una propuesta estratégica que forma parte de la popular serie Worms, la cual constituye la séptima entrega y el último juego de esta saga totalmente diseñado en dos dimensiones, de modo que posteriormente se daría el salto definitivo de esta franquicia al plano tridimensional, uno de los cambios importantes que tanto esperaban los seguidores más acérrimos de Worms, aunque el título al cual nos estamos refiriendo llegó a occidente con el nombre de Worms World Party y mantiene la mismas características básicas de sus predecesores, ya que aún se trata de un videojuego de estrategia especialmente enfocado en la artillería, siendo desarrollado por la gente de Team17, al tiempo que la extinta Virgin Interactive sería la compañía encargada de todos los detalles en relación a su posterior publicación. De esta forma, el lanzamiento al mercado de esta nueva entrega de la serie Worms comenzaría a tener lugar a partir del 6 de abril del año 2001 inicialmente en la Unión Europea, aunque ya para el 16 de junio de ese mismo año era posible encontrarla en la mayoría de las tiendas especializadas en todo lo largo y ancho del territorio norteamericano, estando disponible en un primer momento para los usuarios de los ordenadores caseros que contaban con la plataforma Windows de Microsoft como sistema operativo, siendo portado exitosamente al legendario Dreamcast de Sega apareciendo desde el 27 de abril en Europa y a partir del 3 de junio en suelo estadounidense, además de que la gente de Team17 también optó por producir una versión especialmente diseñada para funcionar en la PSX o Plasytation One de la Sony Computer Entertainment que fue introducida al mercado el 14 de diciembre, aparte de un port más para la consola portátil Game Boy Advance de Nintendo que estuvo disponible para la venta desde el 4 de octubre del año 2002 en Europa y a partir del 29 de octubre de ese mismo año en los Estados Unidos de América, siendo trasladado finalmente al N-Gage y publicado a mediados de los meses de abril y mayo en ambos territorios.

Características Principales

En vista de ello, es necesario mencionar primeramente que la serie Worms tuvo sus humildes inicios como un pequeño juego desarrollado para la plataforma MS-DOS y también para la Commodore Amiga, de modo que la idea que inspiró la creación de este particular título proviene directamente de otro juego para ordenadores caseros llamado Tanks, en donde se le brindaba la oportunidad a los usuarios de controlar sus propios tanques de guerra mientras se iban turnando para disparar algunos misiles en contra de los demás jugadores, siendo esto algo que era posible a través de la entrada de dos valores numéricos durante cada ronda, por lo que el primero de ellos determinaba la velocidad del misil y el segundo servía para establecer el ángulo de proyección de dicho proyectil. Por otro lado, en cada turno se nos permitía ver una representación gráfica de la trayectoria que tendría el misil que posteriormente sería disparado por nuestro tanque de guerra, lo que nos permitía llevar a cabo algunos ajustes específicos en relación a los valores de proyección y la velocidad, todo ello con la finalidad de incrementar las posibilidades de lograr un golpe crítico, de manera que el primer jugador que fuera capaz de realizar este proceso lo suficientemente bien como para conseguir un golpe certero sobre el tanque del oponente, terminaría siendo el ganador indiscutible de toda la contienda.

En concordancia, para el desarrollo de la primera versión de Worms se tomó prestada esta premisa simple y se adaptó para lograr la creación de un juego de estrategia mucho más enfocado en la guerra a nivel masivo, de modo que al igual que en el título denominado Tanks, los jugadores de Worms cuentan con sus respectivos turnos durante los cuales hacen todo lo posible por infligir la mayor cantidad de daño sobre las unidades que están siendo controladas por el adversario, esto siempre en base a las físicas implementadas en el motor de juego. Por otro lado, gracias a la inclusión de una arsenal de armas mucho más amplio en donde cada elemento contaba con sus propias fortalezas y debilidades en situaciones particulares, la idea central que había sido inspirada en el juego Tanks fue llevada mucho más allá de sus posibilidades originales, además de que el turno correspondiente a cada uno de los jugadores se vio limitado en gran parte por la implementación de un temporizador, aunque ya al momento de llevar a cabo el desplazamiento de nuestro gusano debíamos hacerlo sobre un paisaje muy elaborado en base a dos dimensiones.

Por otra parte, en Worms World Party para el Playstation One nuestro arsenal no solamente estará limitado a diversos armamentos, ya que también tendremos a nuestra entera disposición un amplia variedad de objetos dotados con un carácter muchos más defensivo, los cuales serán igualmente seleccionables durante el transcurso de los combates, lo que significa que las partidas en este juego podrían llegar a ser largas contiendas estratégicas, muy comparables hasta cierto punto con las extensas partidas que se suelen jugar en el ajedrez y otros juegos de mesa con características similares. Por otro lado, es un hecho que la versión original de Worms fue un gran éxito a nivel de ventas en muchas plataformas, de modo que hace unos cuantos años atrás apareció una excelente secuela disponible para los ordenadores caseros que llegó con varias adiciones en lo que respecta a la armas utilizadas, una apariencia visual totalmente renovada y mucho más cercana a la de los dibujos animados, así como también otras novedades interesantes, pero a pesar de que Worms 2 era un título bastante bueno en muchos sentidos, sobre todo en lo que respecta al modo más enfocado a la experiencia Multiplayer, su gran debilidad consistía en el Modo Principal para un solo jugador.

Sin embargo, ya para cuando se libera una nueva versión de esta popular serie bajo el nombre de Worms Armageddon, que por cierto logramos revisar a fondo en un artículo anterior, la gente de Team17 se concentró más en el diseño de los niveles que formaban parte del Modo Principal, por lo que se consiguió mejorar en cierta forma la experiencia para un solo usuario, presentando una serie de problemas reales que se debían solucionar en los mapas especiales, los cuales además estaban dotados con un carácter personalizable, aparte de que se añadieron algunas cosas menores en relación al armamento estándar, todo ello con la intención de darle un poco más de equilibrio al juego, siendo esta decisión la que probablemente impidió que esta nueva entrega de la serie lograra conseguir una mayor aceptación a nivel online, aunque al momento de ser portado al Dreamcast de Sega, los usuarios de esta consola lamentablemente no pudieron gozar de las funciones de internet, esto debido a que la red de este sistema casero aún no estaba preparada. No obstante, poco tiempo después, la gente de Team17 se dio a la tarea de preparar otra entrega que fue publicada bajo el nombre de Worms World Party con la que prometían poner a nuestra disposición un conjunto de armamentos más equilibrado, además de varias armas ocultas y mejores misiones para el modo más enfocado en la experiencia para un solo jugador tomado directamente de su predecesora, de modo que tras el lanzamiento oficial de la nueva entrega de Worms hemos comprobado que la misma se encuentra a la altura de los alegatos presentados por el equipo de Team17, siendo considerada como una de las mejores versiones de la serie.

En vista de ello, es importante destacar que en Worms World Party para el Playstation One las armas están muy bien diseñadas, además de que contaremos con la posibilidad de utilizar algunos elementos muy cómicos que también nos servirán para causar daños a las unidades que estén siendo controladas por nuestros oponentes, al tiempo que cada una de las armas disponibles ha sido concebida con especial detenimiento, lo que quiere decir que en este juego no existe ningún tipo de inclusiones innecesarias en este sentido. Por otro lado, es claro que los veteranos de Worms serán capaces de considerar que tipo de arma es la más indicada para una situación en concreto, al tiempo que harán todo lo posible por administrar las municiones de ciertas elementos bélicos que serán adecuados para los momentos más críticos, tales como las Bazucas, las Granadas, las armas que funcionan con balas y los golpes, de modo que el hecho de saber cuándo conservar y utilizar cada una de las armas disponibles convierte a este título en una gran propuesta estratégica.

Por otro lado, es evidente que Worms World Party para el Playstation One se remonta, sin lugar a dudas, a los días de la versión original de la serie, en donde la habilidad es un requisito indispensable al momento de conseguir dar unos buenos golpes sobre una posición ocupada por el enemigo hasta el final de cada turno, aparte de que el modo para un solo jugador es casi tan bueno como el que podemos encontrar presente en la entrega denominada Worms Armageddon, aunque si bien es cierto que este aún no es del todo perfecto, pero aún así es capaz de proporcionarnos una buena cantidad de horas de diversión, al tiempo que representa una gran experiencia para practicar antes de jugar con otros usuarios más experimentados en el Modo Multiplayer. De igual forma, descubriremos que los paisajes pueden ser deformados hasta cierto punto tras la utilización de cualquiera de las armas disponibles, lo que nos obligará a adaptarnos en todo momento a los cambios del entorno, aparte de que además de los conocidos obstáculos naturales y artificiales, los mapas pueden llegar a contener un gran número de minas terrestres que explotarán cuando un gusano se acerque lo suficiente a cualquiera de ellas, además de que también existirán algunos barriles que estallarán cuando estos sean impactados por cualquier disparo, de modo que estos extenderán el napalm que irá afectando a las unidades cercanas, aunque estas particulares características a menudo conducen a combinaciones muy técnicas en las que un gusano es golpeado en primer lugar por una granada, tras lo cual cae justamente sobre una mina que a su vez afectará a otro gusano y así sucesivamente hasta lograrse combinaciones aún más complicadas y mucho más efectivas.

Apartado Gráfico

Ahora bien, en lo que respecta a la graficas de este juego, bien podemos decir que Worms World Party para el Playstation One presenta una apariencia visual bastante aceptable después de todo, muy a pesar de que esta no sea capaz de compararse con la de otras propuestas del mismo género para esta y otras consolas caseras, lo que se debe en gran parte al hecho de que este juego fue concebido en base a dos dimensiones, además de presentar un desplazamiento lateral bastante limitado, aunque si bien es cierto que ese juego no hará uso en ningún momento de la pantalla dividida, ya que utiliza un solo mando que puede ser compartido por varios jugadores al momento de participar en una partida Multiplayer, esto debido a las limitaciones del sistema en lo que respecta a los controles. Por otro lado, descubriremos que el escenario es simplemente un enorme mapa que puede ser cerrado o abierto, es decir, puede tratarse de una ubicación en el interior de la tierra o un área determinada que se encuentre por encima del suelo, en donde por lo general el agua estará en la parte inferior, siendo este un elemento muy utilizado durante las partidas de muerte súbita, aparte de que los gusanos presentan unas dimensiones muy pequeñas, pero aún así es posible ver con especial detalle la expresión de sus caras, las cuales por cierto serán únicas para cada personaje.

Apartado Sonoro

Ya por último, y en lo concerniente al apartado sonoro, tenemos que Worms World Party para el Playstation One igualmente posee un conjunto de elementos audibles dotados de una calidad muy aceptable, de modo que cada una de las armas que estarán a nuestra disposición durante las batallas será perfectamente capaz de emitir sus propios sonidos característicos, sobre todo durante los efectos que estos irán causando en el escenario y sobre las unidades enemigas, lo que quiere decir que cada arma puede llegar a emitir hasta 15 sonidos diferentes. Asimismo, aquí también vamos a poder disfrutar de una banda sonora realmente excelente, la cual estará conformada por varias pistas musicales dotadas con una calidad muy buena y que igualmente presentan un nivel de composición más que aceptable, siendo capaces de compenetrarse demasiado bien con todas las situaciones que se nos irán presentando dentro de cada escenario, muy a pesar de que apenas consisten en ocho temas diferentes, aparte de que todos los gusanos que vamos a poder controlar durante los combates nos ofrecen cientos de frases distintas y miles de sonidos que contribuirán a dotar a este juego de una mayor profundidad, al tiempo que harán menos tediosas las partidas que cuenten con una duración más extensa.