Making History: The Calm & The Storm (PC)

Making History: The Calm & The Storm, Una Herramienta Educativa en la Forma de un Juego de Estrategia por Turnos Especialmente Diseñado para los Ordenadores Caseros, Dotado con Características Muy Similares a las de Risk y Axis & Allies

La Calma y la Tormenta

Desde que la Avalon Hill publicara su ya clásico juego bajo el nombre de Third Reich en la década del 70, la gran estrategia de la Segunda Guerra Mundial ha sido el foco central de numerosos juegos para casi todos los sistemas y plataformas que han existido. Después de todo, ¿qué jugador fanático de la guerra no se pregunta en secreto si Alemania, Japón o cualquiera de los Aliados, en realidad habrían hecho un mejor trabajo que sus contrapartes históricas?.

Por lo que, si Alemania se hubiese aliado con Turquía, o al menos Japón hubiese ido al Canal de Panamá, ¿esto habría cambiado de alguna forma el transcurso de la historia mundial?. Mientras que, el tema de la guerra estratégica, mezclado a su vez con la diplomacia y la economía, es tan convincente que ha habido por lo menos un total de diez títulos en los últimos diez años.

Por otro lado, Making History: The Calm & The Storm (Haciendo Historia: La Calma y la Tormenta), desarrollado en su totalidad por la gente de Muzzy Lane y publicado por los veteranos de Strategy First, es un buen juego para revisitar el mundo del ayer. Además, el juego en sí reúne muchos de los mejores conceptos normalmente usados en la pasada generación de simulaciones de la Segunda Guerra Mundial, e inclusive añade un toque adicional de innovación.

Características Principales

Pero, muy a pesar de que Making History en realidad no es la estrella más innovadora en una constelación tan abarrotada, aún así continúa siendo una oferta bastante sólida, y al mismo tiempo uno de los puntos de luz más brillantes entre sus muchos otros. Aunque, a diferencia del resto de sus hermanos enfocados en la guerra pura, Making History tuvo sus humildes inicios en la forma de una herramienta especialmente diseñada para enseñar la historia de la Segunda Guerra Mundial en las aulas de clase.

Sin embargo, se trata de un juego muy divertido para jugar y no es como las secas simulaciones que a menudo suelen aparecer en el mercado, para su uso por parte de las escuelas. De hecho, la gran mayoría de los jugadores que compran el título fuera de la plataforma, lamentablemente nunca adivinarán el verdadero potencial que tiene este título. Pero, los elementos de diseño impulsados ​​por este patrimonio de clase siguen representando un gran beneficio para los jugadores, a través de una interfaz limpia, capacidades Multiplayer, una buena cantidad de información sobre antecedentes históricos y hasta un montón de Replay Value. Mientras que, la historia pone al jugador en la piel del gobernante supremo de una de las ocho principales naciones que estuvieron en guerra durante la vieja época: Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, China nacionalista, la Unión Soviética y Japón.

Asimismo, existe un total de cinco escenarios que colocarán a los jugadores en la situación histórica de su respectiva nación en los años 1936, 1939, 1940, 1941 o 1944. Mientras que, estos pueden incluso cambiar de facción, poco tiempo después de que el juego haya dado comienzo, la es cual es sin lugar a dudas una gran función de Replay Value. Por lo que, el jugador utiliza entonces la diplomacia, la economía y las fuerzas militares con la intención de conducir a su país hacia la victoria.

Además, el mapa del juego y la interfaz constituyen una oferta de acciones bastante llamativa para un gran juego de estrategia. Al tiempo que cada una de las naciones incluidas ha sido dividida en toda una docena de regiones, dotadas con recursos tales como el petróleo o el hierro y también hasta pueden tener una o dos ciudades a su entera disposición. Aparte de que, cada región está clasificada para cosas tales como infraestructura de transporte y fortificaciones.

De igual manera, al hacer clic en la región, una ciudad o en un marcador de recursos, se mostrará rápidamente mucha información detallada sobre esa parte específica del mapa. Mientras que, las fuerzas de combate estarán representadas por algunos iconos animados, a los que se les pueden dar algunas órdenes de movimiento al momento de apuntar y hacer clic. Además, el título en cuestión está basado en clásico un sistema de turnos y el movimiento trazado es de carácter simultáneo. Al tiempo que el juego presenta un conjunto de pantallas clave, las cuales sirven para presentar una gran cantidad de información que será digerida y ajustada por el jugador. Pero, por fortuna todo se encuentra muy fácilmente y hasta puede ser gestionado con tan sólo unos cuantos clics.

En este mismo sentido, la parte económica del juego es tan sólida como el conjunto anteriormente descrito. Las naciones toman materias primas y las usan para poder llevar a cabo la creación de factores industriales, los cuales pueden llegar a ser utilizados en la producción de bienes de consumo, la construcción de fábricas, suministros de carácter militar, embarcaciones de combate, fuerzas aéreas y hasta unidades terrestres.

Aunque, si bien es cierto que los productos y materias primas también pueden ser vendidos a otras naciones de forma directa, enviados como prestamos y regalos de arrendamiento, o bien, se pueden poner a la venta en el mercado mundial abierto. Mientras que, una opción de diseño muy interesante, consiste en que a las naciones se les permite siempre participar en el gasto deficitario. Excepto por alguna pérdida insignificante de puntos de victoria.

No obstante, no hay ninguna pena en el hecho de acumular deudas indignantes, ya que después de todo, aquí nuestro papel es del gobernante supremo y la guerra es siempre la guerra. Además, la historia, como en la gran mayoría de los juegos del mismo género, permite la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías militares. Mientras que, el árbol de tecnología presenta varios niveles de tierra / aire y fuerzas navales, incluyendo a su vez armas algunas especiales tales como cohetes, jets y hasta la infame bomba atómica. Aparte de que, cuanto más avanzada sea la unidad, más potencia militar esta tendrá. Pero, a pesar de que la característica anterior está muy bien hecha, el modelado histórico es algo un poco descentrado.

Por ejemplo, el jugador de la facción estadounidense, al dedicar bastante de su economía a la investigación, puede explotar casi todo el árbol tecnológico a principios de los años 40. Esto habría sido casi imposible para los EE.UU. en la vida real. Pero, como claramente podremos comprobar, es bastante fácil lograrlo en el juego. Aunque, si bien es cierto que los otros países disponibles no tienen el mismo motor económico que los EE.UU. Por lo que, el ritmo y los resultados ofrecen una sensación mucho más histórica.

Mientras que, en el área de la diplomacia, esta primera entrega de la serie Making History brinda algunas innovaciones con su tratamiento de las existe un verdadero sentido de pertenencia a un grupo de aliados. Así que, crear y administrar bien las alianzas, constituye un factor crítico para poder ganar el juego, y sólo Estados Unidos es capaz de hacerlo sin ningún tipo de ayuda.

Sin embargo, los aliados tienen mente propia y otros intereses en competencia. Además, muchas de las acciones diplomáticas de nuestra nación, tales como ofrecer o aceptar una solicitud para unirse a la alianza, están sujetas a la aprobación de otras naciones aliadas. Por ejemplo, si deseamos que Hungría se una a su alianza alemana / italiana, Il Duce podría vetar la adición debido a alguna antigua mala voluntad.

Pero, a medida que las alianzas se hacen cada vez más grandes, igualmente serán más poderosas y también serán mucho más inflexibles. Así que, como ya nos hemos dado cuenta, las alianzas tienen una influencia muy grande en la forma en cómo se juega este título de estrategia. De modo que, en escenarios de guerra tardía, las alianzas preexistentes tienden a mantener el juego dentro de los límites históricos.

Por otra parte, el escenario del año 1936, constituye un paseo de montaña rusa, ya que en él la única gran alianza preexistente consiste en la Mancomunidad Británica. Por lo que, los extraños alineamientos no históricos, a menudo deforman el juego en algo más parecido a Risk que a la Segunda Guerra Mundial. Además, un juego de 1936 mostró una alianza entre Japón y la Mancomunidad, así como también la unión entre los soviéticos y alemanes. Mientras que, una posible alianza entre los EE.UU., Italia y China simplemente fue colocada en el banquillo. Además, un beneficio muy positivo en relación al sistema de alianza dinámica, consiste en que nunca hay dos juegos iguales, razón por la cual el Replay Value es bastante alto. Pero, más allá de unirse y permanecer en una alianza fuerte, el otro elemento importante para la victoria es el combate.

En relación a esto último, de forma inevitable nuestra nación atacará o será atacada. Pues, debido al sistema de alianzas implementado, incluso las peleas menores, rápidamente se desencadenará un conflicto de carácter global. Mientras que, la unidad militar básica consiste en una división terrestre de artillería, armadura o tropas mecanizadas. Al tiempo que una gran variedad de unidades navales y aéreas también están disponibles.

Así que, estas se organizan en grupos armados, aéreos o navales. De modo que, cuando las tropas de dos naciones en guerra terminan estando en la misma región, inmediatamente se produce un combate. Aparte de que, las batallas grandes o igualadas pueden llegar a durar varios turnos, debido a que cada participante dispondrá de refuerzos frescos durante la pelea.

En este mismo sentido, los aliados a menudo añaden algunas tropas a la mezcla. Pero, lo cierto es que el jugador no tiene ningún tipo de control sobre cuánto o con qué frecuencia esto ocurrirá. Mientras que, cuando un lado ha destruido o empujado hacia fuera a otro, el ganador tomará de forma inmediata el control de la región, y así el combate habrá terminado.

Además, algunas unidades de combate tienen papeles especiales tal y como lo hicieron en la vida real. Por lo que, las unidades de bombardeo pueden acabar con las ciudades enemigas, recursos o hasta pueden apoyar a las fuerzas terrestres. Aunque, las unidades de combate también pueden patrullar regiones para vencer a los ataques aéreos enemigos.

Igualmente, los transportistas tienen aviones que pueden atacar regiones adyacentes y los destructores son muy buenos al momento de luchar contra los submarinos. Además, los diferentes tipos de unidades disponibles tienen un papel muy especial en el combate. Pero, sobre todo el jugador con la más alta calidad y cantidad de tropas será capaz de ganar la contienda.

Aunque, existen algunos aspectos del sistema militar para los jugadores que buscan una sensación más histórica en su experiencia. Al tiempo que la producción de unidades sucederá siempre a un ritmo prodigioso. Por lo que, las ciudades más grandes, a veces pueden llegar a producir una división de infantería en tan solo un turno de una semana.

Históricamente, debían transcurrir varios meses para que una nación lograra poner una división desde cero. Aunque, otra cuestión es que no hay ningún tipo de conciencia logística en las operaciones de combate. Por ejemplo, los jugadores pueden desembarcar sus tropas en cualquier lugar sin tener que preocuparse en ningún momento por las líneas de suministro o el apoyo.

Mientras que, en una oportunidad, la alianza entre Alemania y la España nacionalista trajo la guerra con China, la cual se alió a la España republicana. Por lo que, luego de muchos turnos, los chinos desembarcaron sus ejércitos masivos en la costa báltica alemana y procedieron a desplazarse hasta el norte de Alemania. El juego fue divertido e intenso, pero no muy histórico.

Por otro lado, este título de estrategia para los ordenadores caseros admite la configuración de varios jugadores a través de una red LAN o Internet. Aunque, curiosamente, el juego está basado en un sistema de turnos, pero no ofrece una opción PBEM, lo que limita a muchos jugadores a enfrentarse con el sistema de inteligencia artificial. Pero, esto no es un problema después de todo, ya que la IA puede mantenerse por sí sola y es generalmente muy agresiva.

De hecho, si el jugador se encuentra a solas en contra de una gran alianza, es mejor apostar por la paz, desde temprano y a muy menudo. Mientras que, a nivel general, Making History: The Calm & The Storm es sin duda una simulación muy divertida y sólida. Por lo que, el juego se recomienda más que todo para cualquier persona que quiera una vista de “cerveza y pretzels” de la Segunda Guerra Mundial, y que no pueda dedicar mucho de su tiempo libre a un juego más detallado.

Apartado Gráfico

Ahora bien, en lo que respecta a las gráficas de este juego, a pesar de que Making History: The Calm & The Storm adopta una presentación muy al estilo de los juegos de mesa, es capaz de ofrecernos algunas imágenes realmente agradables. Mientras que, la información suele estar siempre disponible en una gran variedad de ventanas emergentes y hojas de cálculo que son muy sencillas de entender.

Además, el juego a veces oscila entre presentar demasiada y muy poca información, pero una vez que sabemos dónde buscar, normalmente encontraremos la información deseada sin mucho esfuerzo. Aunque, en el caso particular del mapa del juego, que por cierto es muy limpio y colorido, este a veces puede lucir un poco desordenado cuando las unidades empiezan a atacarse entre sí en los territorios más pequeños.

No obstante, en el lado positivo, las unidades son específicas para las naciones que representan. Así, los estadounidenses tienen a sus pequeños destructores Fletcher, los alemanes tienen a los combatientes Me-109 y los soviéticos tienen a sus tanques modelo T-34. Pero, desafortunadamente, no hay mucha animación ni rastros de vida en el mapa. Aunque, los detalles pequeños, son por lo general muy agradables.

Apartado Sonoro

Ya por último, y en lo concerniente al apartado sonoro, tenemos que en Making History: The Calm & The Storm los efectos de sonido son moderados y en ningún momento serán dominantes, ni llegarán a representar una distracción durante el transcurso del juego. Además, existe la posibilidad de hacer algunos ajustes específicos a los efectos de sonido, e igualmente los niveles de la música se pueden manipular a través del menú de opciones. Mientras que, la banda sonora de carácter sinfónico, encaja demasiado bien con el tema del juego basado en los conflictos librados durante la Segunda Guerra Mundial.