P.O.W – Prisoners of War (NES)

P.O.W – Prisoners of War, SNK Triunfa de Nuevo con Este Genial Beat’em Up para el NES

El Gran Escape de Un Solo Hombre

Aparte de los geniales títulos de estrategia que hemos venido abordando a lo largo de todos estos días, también hemos seleccionado algunos de los clásicos más sobresalientes para el mítico Nintendo Entertainment System, un potente sistema de 8 bits que sirvió de cuna para innumerables franquicias de gran renombre internacional, entre las cuales destacan la saga de Castlevania y Contra de Konami, Ikari Warriors, The Legend of Zelda y muchas más, aparte de que la aparición de esta particular consola también contribuiría a salvar a la industria de los videojuegos tras una grave crisis, la cual casi condena al olvido a esta apasionante forma de entretenimiento. En este mismo sentido, uno de los géneros que encontró su lugar en este poderoso sistema desarrollado en su totalidad por la Gran N es el denominado Beat’em Up, el cual en la actualidad podríamos considerarlo extinto, aunque para el momento de su mayor auge era realmente increíble ver la gran cantidad de propuestas que iban surgiendo día tras día, destacando muy especialmente y por encima de todas las demás algunos de los títulos en los que participan las famosas Tortugas Ninja y sus eternos rivales: los Battletoads.

En relación a ello, en uno de nuestros artículos previos tuvimos la oportunidad de abordar una propuesta muy interesante y que también podemos situar dentro de esta misma categoría, la cual llegaría a esta parte del mundo con el nombre de Ikari Warrior III: The Rescue, siendo la tercera entrega de una serie desarrollada por los grandes genios de SNK, responsables directos de una amplia variedad de títulos especialmente diseñados para el NES, como el famoso y controversial Guerrilla Wars, el cual precisamente resultaría ser un clon totalmente mejorado de las primeras versiones de la serie denominada Ikari Warriors. Por otro lado, al momento de abordar dicho título comentábamos que nos habíamos topado con algunos problemas importantes, los cuales mayormente tenían que ver con el manejo de los diferentes armamentos, ya que en este juego se le daba una mayor importancia al uso de los puños y las patadas, aunque no estaba totalmente exento de contar con algunas partes en las que el jugador necesitaba hacerse con determinados elementos, los cuales a la larga le otorgarían cierta ventaja sobre las unidades enemigas.

Asimismo, otro de los problemas del título anteriormente comentado tenía que ver con el hecho de que se había centrado más en ofrecernos una experiencia más cercana a los Beat’em Up más convencionales y que iban ganando cada vez más seguidores en el ámbito de las Arcadias, ya que aquí debíamos enfrentarnos de principio a fin con una gran cantidad enemigos que surgían de todas las direcciones posibles y algunos jefes de nivel utilizando solamente nuestros puños desnudos, aunque si bien es cierto que también contábamos con la posibilidad de efectuar algunas patadas, las cuales a la larga resultaban siendo bastante imprecisas en la mayoría de las situaciones. No obstante, este título en particular no terminaría siendo uno de los únicos intentos de SNK por desarrollar un juego de este mismo género para el Nintendo Entertainment System, el cual estuviera a la par con otras propuestas que habían sido desarrolladas exitosamente por otras compañías del ramo, lo que a decir verdad resultaba mucho más difícil de lo que se podría imaginar tras la aparición del excelente Port de uno de los mejores títulos de las Tortugas Ninja y más aún del título denominado Double Dragon II: The Revenge, siendo este último un videojuego de culto aún en los tiempos modernos, además de constituir una verdadera joya de gran valor monetario para los afortunados usuarios que hayan logrado adquirirlo.

Considerando todo esto, para la consecución de sus objetivos la gente de SNK tomó la importante decisión de seguir un camino muy diferente al que transitaban las demás desarrolladoras del momento, ya que en lugar de crear un fusil de cualquier éxito lanzado para los Arcade, optaron por llevar a cabo lo que mejor sabían hacer: desarrollar títulos de acción basada en entornos selváticos, siendo esta una fórmula que explotaron hasta la saciedad en todas las entregas que conforman la serie Ikari Warriors. De esta manera, el resultado obtenido sería un lanzamiento que hoy revisaremos con especial detalle y que lleva por nombre P.O.W. Prisoners of War, mejor conocido en el país del sol naciente como Datsugoku: Prisoner of War, consistiendo en un videojuego del tipo Beat’em Up con desplazamiento lateral (side-scrolling), siendo publicado a su vez por esta misma compañía desarrolladora de origen oriental, razón por la cual su lanzamiento al mercado se produciría en algún momento durante el transcurso del año 1988, estando disponible originalmente para los sistemas de entretenimiento Arcade, aunque si bien es cierto que pronto terminaría siendo portado al Nintendo Entertainment System, por lo que esta versión casera comenzaría a estar disponible en las tiendas especializadas de todo Japón a partir del 30 de junio del año siguiente, tras lo cual finalmente lograría arribar hasta el continente americano para el mes de septiembre.

Características Principales

Asimismo, con el lanzamiento de P.O.W. Prisoners of War, quedaba en evidencia el hecho de que los genios de SNK sacaron mucho provecho de la gran cantidad de filmes de acción que existían por aquel entonces, la gran mayoría fundamentados en el rescate de prisioneros durante el desarrollo de un gran conflicto bélico que actualmente conocemos con el nombre de la Guerra de Vietnam, además de seguir teniendo como base fundamental la segunda película de la serie Rambo, la cual a su vez había sido de gran importancia durante el desarrollo de las primeras entregas de la serie Ikari Warriors, aunque también hay cierta influencia de otro éxito cinematográfico denominado Missing in Action. Por otro lado, y al igual que en la afamada serie Metal Gear desarrollada por Konami, la gente de SNK incluyó en este particular videojuego a un personaje llamado Snake (nombre cambiado por Bart en la versión para el NES), esto en homenaje a Escape from New York, aunque si bien es cierto que este nombre también se había utilizado por primera vez en un juego denominado TNK III que vio la luz durante el año 1985.

No obstante, el título de SNK al cual estamos haciendo referencia en el presente texto resultaría ser bastante popular en casi todos los salones de arcadias, siendo especialmente recordado por la mayoría de los jugadores como un gran juego, el cual además contaba con un elevado nivel de dificultad y una gran cantidad de enemigos implacables, muy a pesar que todos sus personajes carecían de esa personalidad tan única que ya habíamos visto en otros juegos del mismo género, pero aún así, este es un título que destaca por sus propio méritos. Por otro lado, y al igual que en la serie Double Dragón, en este juego se utilizan tres botones, las cuales tendrán la función de golpear, saltar y patear respectivamente, aunque también existe la posibilidad de realizar algunos saltos tras presionar estos botones al mismo tiempo, siendo esta una de las características más compartidas entre la mayoría de los títulos del género Beat’em Up.

En relación a ello, P.O.W. Prisoners of War nos ofrece dos movimientos adicionales a parte de los anteriormente señalados, de manera que el primero de ellos nos permite combinar los botones para los golpes y las patadas, esto con la finalidad de efectuar un cabezazo a gran velocidad, mientras que el otro nos permitirá golpear a los enemigos desde su retaguardia, algo que vamos a poder realizar luego de presionar el botón de golpe y efectuar un salto de manera simultánea. Por otro lado, es igualmente importante señalar que esta misma fórmula sería utilizada por la gente de SNK, aunque con ciertas variaciones, en otros juegos que también estarían basados en una temática del tipo Beat’em Up, tales como Robo Army y Mutation Nation, aunque a decir verdad, es realmente posible sobrevivir en estos títulos sin tener que utilizar este tipo de movimientos, pero ya en el caso particular de P.O.W. Prisoners of War, descubriremos que es totalmente imprescindible su dominio, ya que las unidades enemigas irán apareciendo de manera constante a nuestro alrededor.

Por otra parte, P.O.W. Prisoners of War sufre del mismo mal que podemos encontrar presente en la mayoría de los Beat’em Up que han sido desarrollados por SNK a lo largo del tiempo, el cual consiste en una escasa variedad en lo que respecta a las unidades enemigas, aunque si bien es cierto que lo pocos enemigos que han sido incluidos dentro del juego cuentan con la ventaja de poseer una amplia variedad a nivel de sus movimientos y comportamientos, lo que a final de cuentas contribuye en gran parte para dotar a este título de una gran intensidad al momento de librarse cualquier combate. Sin embargo, esa misma sensación de intensidad puede llegar a hacerlo muy difícil de abordar en un primer momento por la gran mayoría de los usuarios, ya que las unidades enemigas apenas nos darán tiempo de respirar, aunque muchos de estos enemigos no se quedarán mucho tiempo para darnos una buena paliza, ya que simplemente se irán después de que los hayamos golpeado un par de veces o luego de haber peleado con nosotros durante periodo de tiempo bastante considerable.

Igualmente, en P.O.W. Prisoners of War casi siempre nos veremos inmersos en combates donde tendremos que hacerle frente hasta un total de cinco enemigos al mismo tiempo, por lo que esto combinado con su velocidad y ferocidad, representan un conjunto de características que lo diferencian bastante de otros títulos como el célebre Double Dragon II: The Revenge y el genial Golden Axe, convirtiéndolo así en un título bastante agresivo, el cual además requiere de toda la atención por parte del usuario para ser superado con éxito. Por otro lado, y como ya habíamos señalado previamente, el juego se fundamenta en una plataforma de desplazamiento lateral, razón por la cual tendremos que efectuar el desplazamiento de nuestro personaje a través de varios ambientes que serán muy diferentes entre sí, mientras vamos acabando con todas las unidades enemigas que se vayan atravesando a lo largo de nuestro camino, algo que haremos por medio de nuestros propios puños y patadas, aunque si bien es cierto que también contaremos con la posibilidad de utilizar armas blancas y hasta armas de fuego.

Lo anterior, bien podría ser interpretado como que P.O.W. Prisoners of War es un título relativamente fácil de superar desde un principio, aunque lo cierto es que este se convertirá en una verdadera pesadilla luego de que hayan transcurrido unos veinte minutos aproximadamente, pues a partir de ese momento comprobaremos con asombro que la CPU hará todo cuanto esté a su alcance para evitar nuestro avance hasta el siguiente nivel. No obstante, ya para más adelante notaremos que se irá repitiendo la misma secuencia de eventos una y otra vez a lo largo de todo el juego, por lo que solamente habrá ligeros cambios en relación con las imágenes de fondo, de manera que el comportamiento de las unidades enemigas seguirá teniendo el mismo patrón la mayoría del tiempo, lo que a final de cuentas puede llegar a resultar muy repetitivo para buena parte de los usuarios que logren adquirir este título.

Por otra parte, P.O.W. Prisoners of War es un juego que cuenta con una historia muy básica, ya que la idea central de la trama girará en torno a un individuo llamado Bart, el cual terminará siendo el capitán de la Fuerzas Especiales “M”, de manera que un momento determinado, este personaje se dejará capturar por una nación enemiga conocida con el nombre de GOON y que tiene como principal objetivo la devastación del sistema económico a nivel mundial. En este mismo sentido, parece que Bart es el único prisionero de guerra que se encuentra presente en el interior de la base de operaciones del enemigo, de manera que a partir de entonces el juego dará comienzo en este mismo lugar, poco después de que una explosión le permitiera a Bart escapar de su celda, tras lo cual se nos brindará la posibilidad de controlar a este particular personaje, el cual al principio solamente contará con sus propios puños, pies e ingenio para hacerle frente a todos sus enemigos, aunque a medida que vayamos avanzando entre niveles, también será posible conseguir algunos elementos de gran utilidad como los cuchillos (que son excelentes para acabar con los oponentes de uno en uno) y las ametralladoras (para un máximo de 10 muertes de un solo golpe), por lo que la única forma de encontrarlos será a través de la exterminación de varios enemigos.

Igualmente, en P.O.W. Prisoners of War siempre contaremos con la posibilidad de adquirir algunos interesantes “Power Ups”, los cuales estarán ocultos en algunas de las cabañas, vehículos blindados y otras habitaciones que iremos encontrando a lo largo de cada uno de los escenarios incluidos, aparte de que en la parte inferior de la pantalla encontraremos ubicada una barra que representa la vitalidad total de nuestro personaje, por lo que a medida que este reciba algunos golpes por parte de las unidades enemigas iremos viendo una disminución progresiva de la misma. En este mismo sentido, si la mencionada barra desaparece por completo, será señal de que inmediatamente perderemos una de nuestra valiosas vidas, las cuales conviene decir que serán solamente tres, aunque al igual que en la gran mayoría de los juegos de ese tipo, también contaremos con la posibilidad de encontrar algunos elementos que nos ayudarán a recuperar el estado original de esta barra, aunque si bien es cierto que de esta forma no será posible obtener una vida o continue adicional, ya que la única forma de lograr esto consiste en la acumulación de 30.000 puntos en el score.

No obstante, la clave del éxito de este gran juego de acción es a su vez el mayor obstáculo al cual nos vamos a tener que enfrentar a lo largo de cada uno de los niveles que lo conforman, ya que las unidades controladas por el enemigo no cesarán de aparecer en ningún momento, aunque llegados a este punto también es importante señalar que este juego carece de muchas de las técnicas utilizadas en la gran mayoría de los Beat’em Up que aún podemos encontrar disponibles en el mercado, las cuales son realmente necesarias al momento de vernos inmersos en combates en lo que debamos enfrentarnos a una gran cantidad de enemigos de manera simultánea. Sin embargo, el hecho de que estas técnicas no estén presentes en este gran juego de SNK significa que los jugadores no tendrán más opción que asumir una actitud ofensiva la mayoría del tiempo, razón por la cual deberán acercarse contantemente a las unidades enemigas para poder atacarlas antes que ellas terminen dando el primer golpe, aunque esto contribuye a que hayan más probabilidades de dar algunos pasos en falso o que seamos atacados por sorpresa, lo que a final de cuentas contribuirá todavía más en hacernos perder algunas de nuestras vidas más rápidamente.

Por otro lado, entre las pocas unidades enemigas que se han incluido dentro de este juego, tendremos en primer lugar a los soldados de infantería regulares que estarán ataviados con el típico uniforme de color verde, los cuales por lo general nos atacarán con una sola patada o con un puñetazo, aunque si bien es cierto que algunos de ellos serán capaces de lanzar cuchillos que en determinadas ocasiones se podrán tornar en su contra. De igual forma, algunos de estos soldados estarán armados con potentes ametralladoras semiautomáticas, las cuales además contarán con una dotación de munición bastante limitada, aunque estos también tendrán a su disposición varias granadas de mano, las cuales siempre podremos recoger para devolverles el ataque, de manera que al apoderarnos de cualquiera de estas armas lograremos ganar algo más de ventaja en el campo de batalla, por lo que más adelante descubriremos que su uso será crucial para poder superar el juego en su totalidad.

Asimismo, en P.O.W. Prisoners of War nos toparemos con otro tipo de unidades enemigas, las cuales estarán representadas en la figura de unos individuos vestidos de negro y que serán un poco más difíciles de derrotar que la infantería regular, ya que estos se abalanzarán sobre nosotros portando un cuchillo muy afilado, aparte de que también encontrarnos a otros sujetos que irán ataviados con vestimentas de color azul, los cuales nos atacarán utilizando movimientos que son típicos de las artes marciales. Por otro lado, a medida que vayamos avanzando entre los diferentes niveles también descubriremos un incremento en la dificultad a nivel general, algo que notaremos todavía más al momento de enfrentarnos a estas unidades enemigas, aunque los diferentes jefes de nivel contribuirán aún más en darle un poco de variedad a todo el asunto, ya que por sí solos representan un reto bastante divertido, aparte de que cada uno de ellos presentará muchas características que ayudarán a distinguirlos de los demás, contando a su vez con algunos armamentos y equipos que a la larga los harán todavía más difíciles de derrotar.

Diferencias Entre la Versión Original y el Port para el NES

Por otra parte, la versión originalmente concebida para los sistemas Arcade permitía la participación de dos jugadores al mismo tiempo, de modo que el primer jugador asumía el rol de un prisionero que contaba con una indumentaria de color azul, mientras que el segundo jugador controlaba al que iba vestido de color rojo, aunque el objetivo principal del juego seguía siendo el mismo, ya que había que encontrar la manera de escapar sano y salvo de la base controlada por el enemigo, mientras se iba luchando sin descanso contra todas las unidades que estaban siendo controladas por la CPU. En este mismo sentido, las diferentes etapas consistían mayormente en un campo de prisioneros, un área para el almacenaje de armamentos, la extensa jungla y la base central de operaciones bajo el control de la facción enemiga, aparte de que las unidades enemigas a veces atacaban a los usuarios utilizando algunos vehículos militares como helicópteros de asalto, camiones, motocicletas y otros más.

De igual manera, durante la etapa final del juego era necesario enfrentarse a un último jefe, tras lo cual los personajes se ponían en contacto con el helicóptero de extracción que les permitiría abandonar el área de manera definitiva, aunque en lo que respecta al sistema encargado de los controles, estos consistían en un palanca de mando que brindaba a los usuarios la posibilidad de desplazar a los personajes en ocho direcciones diferentes, aparte de contar además con un total de tres botones de acción que podían ser utilizados para golpear y patear a las unidades enemigas, así como también para efectuar algunos saltos. Por otro lado, en esta primera versión para las Arcadias también se contaba con otros tres ataques especiales, los cuales se podían llevar a cabo por medio de la combinación de dos botones que debían ser presionados de manera simultánea, siendo el primero de ellos una patada aérea, un golpe hacia atrás y un cabezazo, aparte de que también era posible tomar algunas armas que eran arrojadas por algunas de las unidades enemigas a lo largo de cada nivel, las cuales consistían en un cuchillo arrojadizo y una potente ametralladora.

Sin embargo, la versión que fuera especialmente diseñada para el Nintendo Entertainment System lamentablemente se había enfocado más en la experiencia para un solo jugador, aunque del resto conservaba la misma historia y el mismo objetivo central, pero contando además con un sistema de control muy diferente al de la versión anteriormente lanzada para los sistemas Arcade, aparte de que aquí también era posible recoger y utilizar las granadas de mano, algo que se podía realizar en varias oportunidades. En este mismo sentido, otra de las diferencias importantes entre esta versión y la original, consistía en la inclusión de nuevas unidades enemigas, tales como los hombres rana y los soldados armados con escopetas, aunque además se incluyó a un nuevo jefe final, así como también varias habitaciones y cabañas en las que era posible encontrar algunos Power Ups tras vencer a un grupo pequeño de unidades enemigas.

Apartado Gráfico

Ahora bien, en lo que respecta a las gráficas de este juego, conviene decir que la desarrolladora SNK es bien conocida por dotar a cada uno de sus lanzamientos para cada sistema con una apartado gráfico de buena calidad, aunque obviamente no estan exentos de cometer algunos errores en este sentido, ya que si bien es cierto que este título en particular nos da la sensación de estar escapando de una prisión ubicada en la selva, pero la verdad es que hay muy pocos detalles que contribuyan a reforzar esta idea a nivel visual. Asimismo, las unidades enemigas presentan un movimiento bastante rígido la mayoría del tiempo, lo que evidencia una falta de trabajo a nivel de animación para los diferentes sprites, los cuales además no serán tan variados como se esperaría, aparte de que el personaje principal igualmente presentará una serie problemas muy similares, ni hablar de los efectos visuales y los diferentes armamentos que estarán disponibles dentro del juego, ya que estos últimos elementos presentarán una calidad bastante regular, razón por la cual consideramos que con algo más de trabajo se hubiese podido lograr algo mucho mejor en este sentido.

Apartado Sonoro

Finalmente, y en lo concerniente al apartado sonoro, tenemos que P.O.W. Prisoners of War presenta una banda sonora bastante aceptable, aunque si bien es cierto que ninguna de las pistas musicales podría llegar a ser considerada como memorable ni mucho menos, pero afortunadamente todas ellas se adaptan muy bien a las diferentes situaciones que se nos irán presentando a lo largo de todos los escenarios que conforman este gran juego de acción desarrollado por SNK. Por otro lado, aparte de lo anteriormente comentado, también notaremos una gran escases a nivel de efectos de sonido, aunque llegados a este punto debemos admitir que los pocos sonidos incluidos suenan bastante bien y están perfectamente sincronizados en el tiempo, destacando muy especialmente aquel que pretende simular el ruido emitido por la ametralladora, aparte de que el sonido de las bombas también les ha quedado excelente, aunque del resto no hay nada más que destacar aquí, por lo que finalmente comentaremos que este apartado supera con creces al gráfico.